Acceso a este edificio, que se comenzó a construir en 1523 como convento de Dominicos y que hoy ofrece al visitante uno de los establecimientos hoteleros de más prestigio, elegido por los actuales Príncipes de Asturias para su luna de miel. En esta estancia destacan las vigas de madera labrada y el acceso al claustro y resto de dependencias.