La ermita de San Roque, levantada en la porción más grande del parque municipal de El Rasero, fue construida tras la epidemia de peste que asoló el país en el año 1599 como cumplimiento de un voto.
La ermita de San Roque, levantada en la porción más grande del parque municipal de El Rasero, fue construida tras la epidemia de peste que asoló el país en el año 1599 como cumplimiento de un voto. En su exterior un escudo de la Villa recuerda la importante aportación económica concedida por el Ayuntamiento de la localidad para su construcción.